El libro de Daniel nos muestra una alianza de diez naciones que gobernara en los tiempos del fin. Esta confederación de naciones tiene su raíz en el Imperio Romano (Daniel 2:31-35), y tiene como gran propósito entregar su poder y autoridad a un solo líder político (Apc.17:13), que emergerá de entre ellos y traerá consigo la promesa de solución a todos los grandes problemas que atraviesa la humanidad.
El carisma y popularidad de este hombre serán enormes, será admirado y respetado por todo el mundo y es muy probable que una fracción del judaísmo lo llegue a considerar incluso como el Mesías que esperan.
Bajo la bandera de la paz, unirá a la humanidad en un "nuevo orden mundial", y esta lo seguirá fascinada por su filosofía y por sus obras que rayaran en lo sobrenatural.
Cada ser humano deberá sumar su adhesión a este sistema a través de un sistema de tecnología avanzada, que no solo lo identificara con su nuevo líder, también le permitirá ser parte del sistema globalizado que incluirá entre otras cosas una sola moneda y una sola religión. Sin esta identificación nadie podrá comprar ni vender y quedara fuera de todas las garantías de este nuevo y prometedor gobierno.
Las tensiones religiosas parecerán desaparecer, pues todo el mundo se unirá en un sistema ecuménico que será encabezado por un prominente líder religioso que además será la mano derecha del gobernante antes mencionado.
El mundo parece ir muy bien, después de momentos muy críticos, la humanidad parece haber encontrado el camino, este nuevo sistema le permite al hombre conectarse con su interior, con la naturaleza, con aquellos que son diferentes a el. La tolerancia es la gran consigna y muy pocos parecen recordar el obsoleto sistema de valores del viejo libro.
El gran logro político de este imperio será el reafirmar el acuerdo de medio oriente, dándole garantías de paz y seguridad al pueblo de Israel para que este pueda cumplir sus grandes anhelos nacionales, los cuales sin duda estarán relacionados con el templo y con su sistema de sacrificios religiosos.
Permíteme añadir un ultimo comentario, esta confederación de diez países gobernara el mundo en los siete años que anteceden a la venida del verdadero Mesías, y pese a toda esta filosofía engañosa, a los tres años y medio de este gobierno se conocerá el verdadero origen y naturaleza de este nuevo sistema político-religioso que ya esta en marcha.
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